Disfruta de tu viaje a Valencia con esta guía

Bruno Almela

¿Qué no te puedes perder a tu paso por Valencia? Desde ahora, esta guía se convertirá en tu referencia de bolsillo para sacarle el máximo provecho a una ciudad que tiene tanto para ofrecernos. Joya cultural y arquitectónica de la costa levantina, Valencia atesora uno de los cascos históricos más grandes de la península ibérica, repleto de museos, catedrales y playas. Acompáñanos a conocerla.

¿Cómo llegar a Valencia?

Existen múltiples formas de arribar a Valencia. Una de ellas, la más rápida y confortable, es a través del Aeropuerto de Manises, a solo ocho kilómetros del centro, y conectado al mismo con una amplia red de autobuses y taxis. Adicionalmente, tenemos a nuestra disposición dos estaciones de trenes (Joaquín Sorolla y la Estación del Norte), enlazadas con numerosas ciudades del resto de España. Una vez dentro de la ciudad, es aconsejable desplazarse a pie, puesto que aunque contamos con metro y autobuses, se trata de una zona azul, y no sólo se hará difícil desplazarnos en coche, sino que además nos perderemos de disfrutar cada detalle.

Lo que no te puedes perder en Valencia

Si arribas en tren por la Estación del Norte, la primera parada obligatoria será la Plaza de toros de Valencia, que guarda similitudes con el Coliseo Romano. A partir de este punto podremos descubrir el Banco o el Ayuntamiento, para luego dirigirnos a la Catedral de Valencia, desde donde comienza nuestra travesía.

¿Vas a Valencia? Come un buen arroz

Ir a Valencia y no comer arroz es como ir a París y no ver la Torre Eiffel. La paella es su plato más conocido mundialmente, pero tipos de arroces hay más, buenísimos todos, y seguramente te encantarán. Arroz a banda, arroz seco, arroz meloso,… la fideuá es también un plato que no te puedes perder.

Y para que el plato que escojas te guste de verdad, tienes que ir a una buena arrocería. Yo he ido mucho a Valencia y mi visita obligada es el restaurante arrocería Pilsener. Tienen una carta variada, la calidad es excepcional y los precios muy ajustados. ¡No os arrepentiréis de ir!

Catedral de Valencia

Se denomina Iglesia Catedral-Basílica Metropolitana de la Asunción de Nuestra Señora de Valencia o simplemente “Seu”. Su estilo gótico tan marcado también deja espacio para algunos vestigios románicos, renacentistas y neoclásicos. En fin, todo un espectáculo arquitectónico fundado en 1238 y cuyo interior resguarda una de las colecciones de pinturas más importantes del período Quattrocento. A la izquierda de la catedral, nuestro próximo destino: la Basílica de la Virgen de los desamparados.

Basílica de la Virgen de los desamparados

Es el monumento que venera a la Patrona de Valencia, se encuentra frente a la Plaza de la Virgen, y junto a la Fuente alegórica del río Turia y la torre Micalet, configuran uno de los puntos más importantes y hermosos de toda Valencia. Respecto a la torre Micalet, podemos decir que es casi un pecado no visitar este campanario y deleitarnos con sus vistas tan exuberantes, como también se volverá irresistible adentrarnos en el Palacio de las Cortes, antigua residencia de la familia Borgia.

Lonja de la Seda

También conocida como Lonja de los Mercaderes, data del siglo XV y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1996. En otras palabras, no podemos perdernos esta obra maestra del gótico civil valenciano, testigo además del desarrollo económico de la ciudad y cuyo interior nos devela hermosas columnas, inscripciones en latín y escaleras de piedra que conducen a otros tesoros igual de asombrosos.

Barrio del Carmen

Herencia musulmana que perdura hasta nuestros días, el Barrio del Carmen destaca a primera vista por sus torres y palacios, y termina enamorándonos finalmente con el Museo de Prehistoria de Valencia y el Museo Valenciano de Etnología, además de contar con la Iglesia del Carmen, el Centro Cultural de la Beneficencia y la Casa-Museo del pintor José Benlliure. Como recomendación especial, no te olvides de visitar las Torres de Quart.

Sobre los museos de Valencia

En total, suman cerca de 50 museos que se dispersan por toda la ciudad, todos ellos de gran interés, pero que si debiéramos resumir aquellos imperdibles, no podríamos dejar de mencionar el Museo Nacional de Cerámica, ubicado en el Palacio del Marqués de Dos Aguas, la Casa de las Rocas, el Museo Fallero, el Museo de Bellas Artes San Pío V, y finalmente el Museo de Arqueología de la Almonia, que salvaguarda importantes elementos constructivos de la historia valenciana.

Playas de Valencia

Mención especial para las maravillas costeras de esta ciudad, que tan solo a 15 minutos del centro nos deslumbrarán con algunas playas como Las Arenas, el Cabañal o la Playa de la Malvarrosa, idílica tanto por su arena como por sus servicios gastronómicos.

Ciudad de las Artes y las Ciencias

Para concluir nuestra estancia con broche de oro, nada como visitar la Ciudad de las Artes y las Ciencias. El moderno complejo se enorgullece de algunas construcciones como El Oceanográfico, el acuario más grande de Europa, el Palacio de las Artes Reina Sofía, así como L’Umbracle, imponente por sus jardines flotantes y sus muestras de botánica. Sin duda, todo un espectáculo para nuestros ojos.