Las 10 mejores playas nudistas de España
Nichos donde nuestros cuerpos se emparentan con la naturaleza, donde podemos respirar la libertad del desnudo y dar rienda suelta a nuestra expresión, así definimos esta lista con las mejores playas nudistas de toda España, una guía más que necesaria para planificar tus próximas vacaciones sin otro equipaje que no sea tu crema solar y tus ganas de entregarte al agua. Aquí tienes 10 razones para quitarte la ropa este verano. Que nada te detenga.
Cala Roques Planes
Virgen, inocente y salvaje al mismo tiempo, esta cala catalana del municipio calongino, no sólo es famosa por la suavidad de sus aguas o el paisaje tan pictórico que sus rocas nos regalan, la Cala Roques Planes también reúne todos los motivos necesarios para convertirse en nuestro próximo destino nudista. Aunque no dispone de servicios de playa (los podremos encontrar en la vecina playa de Can Cristus), sí podemos asegurar que se trata de un espacio en la Costa Brava apto para mimar nuestros sentidos.
Playazo
Andalucía se enorgullece de contar con una playa tan hermosa. Reconocida oficialmente para nudistas, el Playazo es un verdadero culto a la expresión de nuestros cuerpos, no sólo por la gran extensión (casi 4 kilómetros) que comprende, perfecta para sentirnos verdaderamente libres, sino por la magia de sus aguas y su arena, su gran cantidad de servicios de playa, y el hecho de ser una playa urbana, de fácil acceso y cargada de buen ambiente andaluz. Enclavada en la localidad de Vera, aquí también podremos disfrutar del hotel Vera Club Playa, un establecimiento naturista de los primeros de su tipo.
Barinatxe
Se encuentra refugiada por las zonas municipales de Getxo y Sopela, y es tan popular entre los nudistas, que cada año toma lugar aquí la Carrera Nudista de Sopelana, en el mes de julio. Para los locales, Barinatxe es conocida también como La Salvaje, un claro guiño al perfume natural y exclusivo de esta playa, donde nudistas, surfistas y turistas con malla cohabitan sin conflicto. Amistosa por su arena fina y espontánea en su oleaje, Barinatxe se volverá una de tus favoritas. Además, cuenta con todo tipo de servicios.
Playa de Veneguera
Sí. No podía ser otra que Gran Canaria, una perla en el Océano Atlántico lista para abrigar nuestros cuerpos desnudos en la Playa de Veneguera. Considerada por muchos naturistas como una de las mejores playas de España, esta playa no sólo destaca por sus ingredientes naturales, sino también por el ambiente desenfadado y cordial de sus bañistas. Enclavada en el municipio de Mogán, y con casi 400 metros de costa, la playa de Veneguera es famosa por sus aguas tranquilas, su arena dorada y sus cantos rodados. Además, se encuentra rodeada de entornos naturales fantásticos.
Playa de las Salinas
Aunque no es una playa muy extensa, sus poco más de 200 metros de largo son suficientes para regresar a ella una y otra vez cada año. Aquí, podrás practicar el nudismo con total tranquilidad, pues la vorágine turística no ha mermado el encanto natural y salvaje de sus costas. Caracterizada por la presencia de rocas y un fuerte oleaje, la Playa de las Salinas es sencillamente espectacular. Mención especial para las piscinas naturales que toman lugar aquí, una especie de refugio secreto donde la ropa está de más. Anímate a probarla. ¿Buscas más playas nudistas en Gran Canaria? Descubre las mejores playas nudistas de la isla en este artículo.
Playa de El Saler
Un templo donde recrear la libertad de nuestros cuerpos, así es la Playa de El Saler, punto de obligada visita a nuestro paso por la Comunidad Valenciana. Favorita de muchos nudistas, este rincón repleto de pinares, dunas y aguas turquesas, se extiende a lo largo de 800 metros poco frecuentados y listos para hacer de nuestra jornada, una completamente inolvidable. Además, la playa cuenta con varios servicios y un clima muy agradable para hacer nuevas amistades, y así olvidarnos de la rutina por un momento.
Playa Figuerias
Sería imposible describir la belleza de esta playa en tan pocas líneas. Basta quizás con decir que es una de las mejores playas, sino la mejor, para disfrutar de un ambiente nudista auténtico en suelo español. Refugiada bajo el clima tan peculiar y enigmático de las islas Cíes en Pontevedra, la playa Figuerias, un orgullo gallego repleto de vegetación exuberante y arena idílica, es un sitio más que necesario para disfrutar de nuestras vacaciones por todo lo alto. Si apenas te encuentras descubriendo la filosofía del nudismo, definitivamente tienes que comenzar por esta playa.
Torimbia
No en vano se considera una de las playas más espectaculares de Asturias, y es que su vegetación colindante supone un tesoro único para el espectador, una combinación de prados verdes y caminos empedrados que, en su maridaje con el azul del mar, componen un paisaje natural perfecto para los nudistas. Ubicada en el concejo de Llanes, y considerada como parte del paisaje protegido de la Costa Oriental de Asturias, Torimbia ha sido una bandera para el nudismo desde mediados del siglo pasado. Vamos, que no te la puedes perder.
Playa de Ses Illetes
Si de playas y calas se trata, sería un pecado imperdonable no referirnos a las Islas Baleares. En esta región bendita del Mediterráneo, la Playa de Ses Illetes se alza como la candidata perfecta para desnudarnos a la luz del sol, no sólo porque, para muchas personas, se trata de la mejor playa del mundo, sino porque esta suerte de costa virgen paradisiaca cuenta también con el privilegio del Parque Natural de Ses Salines. Dicho de otro modo, un clima de paz, ambiente natural envidiable, dunas y mar despierto para que podamos cumplir todas nuestras fantasías.
Playa de Bolonia
Una auténtica playa gaditana, célebre por sus dunas y sus aguas mansas. En Bolonia, no es difícil encontrar varios puntos de su costa donde nos descubramos completamente solos, y es que, si de contar con unas horas de paz y recogimiento se trata, a solas con nuestros cuerpos descubiertos, no existe mejor lugar que este. Bien en Los Baños de Claudia, o en el Chorrito, entre Punta Paloma y la propia Bolonia, cualquiera de estas zonas puede convertirse en el escenario perfecto para despojarnos de nuestras ropas y vivir, simplemente vivir.